La Resistencia italiana o Resistencia partisana (en italiano, Resistenza italiana o partigiana) fue un movimiento armado de oposición al fascismo y a las tropas de ocupación nazis instaladas en Italia durante la Segunda Guerra Mundial. La Resistencia desarrolló una guerra de guerrillas tras el Armisticio de Cassibile (8 de septiembre de 1943, cuando Italia fue invadida por la Alemania Nazi) y finalizó en abril de 1945 con la rendición de las tropas alemanas.
Se calcula que más de 300.000 personas participaron en la lucha armada de la Resistencia (de las cuales, unas 35.000 fueron mujeres). Sus miembros tenían una procedencia social e ideológica muy diversa: la Resistencia se nutrió de las fuerzas armadas del Reino del Sur, de voluntarios, de miembros de los partidos políticos (democristianos, comunistas, liberales, socialistas), miembros del Partito d’Azione, del Partido Popular Italiano, monárquicos, anarquistas, etc. Se opusieron política y militarmente a la ocupación nazi y a la República Social Italiana (RSI) fundada por Benito Mussolini.
Los partidos más importantes de la Resistencia constituyeron el Comité de Liberación Nacional (CLN). La lucha armada se dio por terminada el 25 de abril de 1945, cuando el Comité de Liberación Nacional de la Alta Italia (CLNAI) consiguió el control de casi todas las ciudades del norte del país, último territorio todavía en poder de las tropas nazis en su retirada hacia Alemania. La rendición incondicional del ejército alemán tuvo lugar el 29 de abril de 1945, aunque en alguna ciudad como Génova ya habían depuesto sus armas ante los partisanos días antes.
La Asamblea Constituyente elegida en 1946 estuvo compuesta en su mayor parte por miembros del CLN, que fueron los que redactaron la Constitución de la República Italiana, inspirada en los principios de democracia y antifascismo característicos de la Resistencia.